Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo

El 18 de diciembre de 2007 la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 62/139 resuelve elegir el 2 de abril como Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, con el fin de alertar acerca de esta enfermedad, cuya incidencia se ha elevado en todo el mundo.

El texto, originado por Qatar y defendido por otros 50 países, fue certificado por consenso en el Comité de Derechos Humanos de la Asamblea General. Este documento plantea una importante preocupación por la alta incidencia del autismo en los niños de todo el mundo. A su vez, recuerda que el diagnóstico anticipado, al igual que la intervención y la investigación adecuadas “son importantes para el crecimiento desarrollo”.

Esta resolución señala además que la Convención de los Derechos del Niño acuerda el derecho de los menores discapacitados a poder disfrutar de una vida totalmente plena y también digna.

Cuando hablamos del autismo, estamos hablando de un conjunto de alteraciones semejantes, pero cuya manifestación varía mucho en grado y forma de unas personas a otras. Por lo tanto, la idea de tomar el autismo como un continuo espectro, más que como una categoría única, nos ayuda a entender que, cuando hablamos de autismo y otros trastornos generalizados del desarrollo, estamos empleando términos comunes para hablar de personas muy diferentes.

AUTISTALa atención temprana y un adecuado tratamiento, no sólo farmacológico sino y sobretodo terapéutico desde el momento que se detecta, hace que la calidad de vida de estos niños sea mucho más exitosa. Para ello la sociedad debe entender qué es el autismo.

La sanidad y la educación son dos puntos importantísimos que si no se desarrollan adecuadamente, condenan a estos niños; por lo que deben ir a la par y conocer bien lo qué significa AUTISMO.

Hay una serie de síntomas que pueden ser útiles para los padres, cuando notan que sus hijos no siguen el desarrollo normalizado. Es en ese momento cuando se debe consultar con el pediatra y éste canalizar para que, si se diera el caso, el niño empezara su tratamiento. Cuando esa valoración y posterior tratamiento es rápido y adecuado el avance del niño es favorable.

El autismo consiste en una enfermedad incurable que perturba a seis de cada mil menores de 10 años y trastorna las capacidades de comunicación, imaginación y relación, sin que, por ahora, se conozcan sus causas puntuales.

Esta fecha es una ocasión para todas las organizaciones que trabajan cada día para poder mejorar la calidad de vida de las personas que padecen autismo y para lograr que sus derechos sean ciertamente disfrutados, dar a conocer la situación del autismo, informar a la sociedad y promover de esta forma una mejor comprensión de este trastorno y todas sus implicaciones en los individuos y también en sus familias.

Hay todavía una insolvencia de datos en lo que se refiere al autismo, esto no es sólo en cuanto al número de personas que lo sufren sino además en lo referente a demás aspectos como por ejemplo las causas o el tratamiento más apropiado para una situación que es crónica. Ciertos estudios llevados a cabo recientemente instituyen que se ha producido en los últimos años un importante aumento de la tasa de casos identificados, desconociéndose a su vez el origen de este acrecentamiento.

‘La vida no va de cromosomas’, nueva campaña de Down España para el Día Mundial del Síndrome de Down

El próximo 21 de marzo se celebra el Día Mundial del Síndrome de Down. Para esta edición, la asociación de Down en España ha basado su campaña en “La vida no va de cromosomas”, bonita frase sobre todo si nos ponemos a pensar todo lo que conlleva. El síndrome de Down es una alteración genética producida por la presencia de un cromosoma extra (o una parte de él) en la pareja cromosómica 21, de tal forma que las células de estas personas tienen 47 cromosomas con tres cromosomas en dicho par (de ahí el nombre de trisomía 21), cuando lo habitual es que sólo existan dos.

Este error congénito se produce de forma natural y espontánea, sin que exista una justificación aparente sobre la que poder actuar para impedirlo. No hay que buscar culpables. El síndrome de Down debe su nombre al apellido del médico británico John Langdon Haydon Down, que fue el primero en describir en 1866.  Sin embargo, fue en julio de 1958 cuando el genetista francés Jérôme Lejeune descubrió que el síndrome consiste en una alteración cromosómica del par 21.

El síndrome de Down es la principal causa de discapacidad intelectual y la alteración genética humana más común: 1/700 concepciones. La incidencia aumenta con la edad materna, especialmente cuando ésta supera los 35 años, siendo éste el único factor de riesgo demostrado de tener un hijo con síndrome de Down.

El síndrome de Down no es una enfermedad y, por lo tanto, no requiere ningún tratamiento médico en cuanto tal. Además, al desconocerse las causas subyacentes de esta alteración genética, resulta imposible conocer cómo prevenirlo.

La salud de los niños con síndrome de Down no tiene por qué diferenciarse en nada a la de cualquier otro niño, de esta forma, en muchos de los casos su buena o mala salud no guarda ninguna relación con su trisomía. Sin embargo, tenemos niños con síndrome de Down con patologías asociadas. Son complicaciones de salud relacionadas con su alteración genética: cardiopatías congénitas, hipertensión pulmonar, problemas auditivos o visuales, anomalías intestinales, neurológicas, endocrinas… Estas situaciones requieren cuidados específicos y sobre todo un adecuado seguimiento desde el nacimiento.

El diagnóstico del síndrome de Down puede hacerse antes del parto o tras él. En este último caso se hace con los datos que proporciona la exploración clínica y se confirma posteriormente mediante el cariotipo, esto es, el ordenamiento de los cromosomas celulares.

Las pruebas prenatales pueden ser de sospecha (screening) o de confirmación. Estas últimas se suelen realizar únicamente si existen antecedentes de alteraciones genéticas, si la mujer sobrepasa los 35 años o si las pruebas de screening dan un riesgo alto de que el feto presente síndrome de Down.  Esto explica, en parte, que más de dos tercios de los casos de nacimientos con síndrome de Down ocurren en mujeres que no han alcanzado dicha edad.

Al igual que el síndrome de Down, la mayoría de las alteraciones congénitas diagnosticadas gracias a pruebas prenatales no pueden ser tratadas antes del nacimiento. Este hecho, unido al pequeño riesgo de aborto espontáneo que conllevan las pruebas de confirmación, hace que muchas mujeres opten por no llevar a cabo estos exámenes, tema éste que la mujer debe debatir con su médico de confianza.

En cualquier caso, el diagnóstico prenatal puede ayudar a los padres a prepararse emocionalmente para la llegada de un hijo con discapacidad intelectual y dispensarle así, desde un principio, el cariño y los cuidados especializados que requiere.

Ser padres de un niño especial te capacita para ver la vida y las necesidades de forma diferente, lo importante es vivir, porque la vida no va de cromosomas.

Para ver la campaña pulse aquí.

Farmacia Acacia dona seis cestas de productos infantiles a la Parroquia Santa Teresa del Niño Jesús de Leganés

Las pasadas Navidades pusimos en marcha una campaña en nuestro Facebook, a través de la cuál se donaba un euro en productos infantiles por cada me gusta que se hiciera en la misma.

Gracias a vuestra colaboración logramos reunir un total de 350 me gustas, que los transformamos en 6 cestas de productos infantiles por valor de 350 €.

La pasada semana las donamos a la parroquia Santa Teresa del Niño Jesús de Leganés para que sean repartidas entre las familias más necesitadas de la localidad.

Muchas gracias a todos los que colaborásteis.